II Festival colombino Carnavalero

Ayer comenzó el II festival colombino. Cinco agrupaciones punteras esperaban en los camerinos, sudando por los cuatro “costaos”. ¡Joé, si los del patio de butacas pensaban que había goteras, y era el sudor del personal del gallinero, que con tanto abanico, los ” chorrreaban “pa´bajo”. Aun así, el ambiente fue el que se esperaba. A muchos les salieron callos en las manos de tanto aplaudir, y no era para menos, el calor era insoportable y esa era la única forma de crear un poco de aire; además, debo reconocer que cada grupo se superaba, hasta el punto que en algunas ocasiones tuve que parar para que el público dejara que el grupo se fuera y se pudiera dar el trofeo del monumento a la Fe, símbolo de la participación en este festival, que fue entregado por Juan Franco, secretario de la Junta gestora.

Primeros premios del concurso de Huelva y Cádiz, así como una comparsa invitada, la del Puerto de Santamaría, nos estuvieron deleitando durante cinco horas. Así, sin más, el mismo tiempo que tardó José Luís Orta en recorrer el Estrecho a nado. Aún no comprendo cómo se puede aglutinar a tanta gente en un mismo espacio sin el aire acondicionado. Espero que para febrero se resuelva este asunto, porque me veo haciendo el concurso en la Plaza de las Monjas. Cada año lo tenemos más difícil. Un servidor estuvo presentando el evento. ¿Qué cosas, verdad? Así que vestido para la ocasión y con menos pelos en la barba que Puyol en la calva, disfruté del festival. Debo reconocer que “las vueltas al ruedo son duras” y ya uno no está para tantos trotes.

Al margen de todo esto, el festival se desarrolló con naturalidad. Córdoba, lejana…, como decía mi tocayo, pero en esta ocasión no tan sola, fue la primera agrupación en salir a escena, mostrando su calidad para ese merecido primer premio en la modalidad de comparsa. El siguiente grupo, el único onubense, “Los viudos alegres”, de Jesuli Perojil, que levantó al respetable en varias ocasiones y no, no era por el calor que hacía, la realidad fue que la chirigota estuvo a la altura y fue correspondida como se merece. Huelva también tiene calidad en las tablas y sabe hacer buen carnaval y así lo demostraron. A pesar del calor, no se movió un alma de los asientos, aquello parecía una sauna común, vamos, que voy a dejar de hacer dieta y acudir a todas las funciones. La comparsa de El Puerto de Santamaría, invitada para la ocasión, tuvo la ovación más efusiva de cuantas pasaron por los escenarios, más de cinco minutos estuvieron aplaudiendo a este gran grupo, quienes se comprometieron a participar en el concurso de Huelva; esperemos a febrero, que hablar es muy fácil.
“La mare que me parío” comparsa gaditana, fue la siguiente en subir a las tablas. Con todo el respeto al respetable jurado, no entiendo ese primer premio en Cádiz. Si no fuera por los temas de antaño… De todas formas el grupo suena tremendo, con voces muy conjuntadas y perfectamente afinadas, pero creo que los años no pasan en vano para su autor. La suerte que tenemos es que en Cádiz, la nueva generación como Aragón, Rivero, Tovar, Bienvenido, etc… viene pegando muy fuerte y espero que en siguientes festivales los tengamos por nuestra tierra. Para finalizar este gran festival, tuvimos la suerte de contar con la chirigota de Quique Remolinos, amigo y gran showman, maestro de los escenarios, que nos hizo pasar un buen rato. “ Salón de belleza el tijerita”, primer premio en Cádiz. Todo un espectáculo que nos hizo reir hasta la saciedad.

Lo mejor de la noche fue una pequeña introducción al disco que se está creando en la Asociación Arrabales de hermanamiento entre Huelva y Cádiz, donde el onubense Jesuli Perojil y el gaditano Remolinos, se unieron para dar un adelanto de lo que será dicho CD. Tras este acto de introducción, Quique le regaló un pasodoble con música de Jesuli, donde le muestra su amistad, letras escritas horas antes de Festival.
Con un buen sabor de boca, concluyó dicho evento que esperamos se repita el próximo año. Con este acto y con el teatro “a reventar” y el calor, que no se puede olvidar, se ha demostrado que a Huelva le gusta el carnaval y quiere más de lo que se tiene, pide más de lo que se le da y debe exigir más de lo que se le debe.


Federico Pérez "El coronel"